11 días para el duelo

DUELO

Recuerdo que los primeros meses sin mamá eran literalmente invivibles, el dolor era tan grande y profundo que parecía infinito e inconmensurable, infinito y permanente

En unos días será un año de su partida y me propuse hacer este diario de duelo porque aun tengo mucho dolor que procesar y mucho que decir y denunciar, así sea a través de este sencillo blog, de este sincero escribir

EMERGENCIA

Después de la segunda noche de mamá sentada en una silla de ruedas y con personal de Susalud y del mismo hospital buscándome para solucionar el "tema" de mamá lo único que logré fue una queja en el libro de reclamaciones y la noticia de que el tumor de mamá era maligno...

ABRO PARÉNTESIS AL DOLOR
Yo estaba triste y con mucha rabia, sentada frente a la señorita que atendía en la oficina de Atención al usuario, mamá seguía en emergencia, en la misma silla hacía dos días porque no conseguían hacer su traslado a el hospital Sabogal en el Callao para hacerle la tomografía que correspondía, la mujer de atención al usuario me decía que eso no dependía de ellos que no sabían cuanto iba a demorar el traslado [la sospecha de lo peor me mataba y el tiempo transcurría pero aún no sabía del cáncer, mi ser los sospechaba] mientras según ella hacía TODO LO POSIBLE por solucionar el "tema", redactaba documentos, me mostró uno como para que yo sepa que algo hacían, el vistazo que dí fue a parar a esas palabras, las peores de mi vida: TUMOR MALIGNO
CIERRO PARÉNTESIS AL DOLOR

Le grité a la mujer que nadie nos dijo que era maligno que aún sabiendo eso como era posible que se demoraran así (ella era una piedra, solo podía compararla con la piedra de su corazón)

Me fui a ver a mamá, no recuerdo si le dije que era maligno, hice mi último intento por confiar, hablé con la encargada de destinar quien era trasladado y me enseñó la larga lista de espera de emergencia...
(sí, pero mi mamá tiene cáncer, lo pensé, pero no dije, todos en ese lugar sufrían, quien era yo, para decir que el mal de mi madre era superior) le pregunté cuando aproximadamente sería el traslado y ella dijo que no se sabía... le dije, entonces usted me está diciendo que mi mamá que tiene un tumor maligno, está amarilla y no come hace dos días, debe seguir esperando sentada en esa silla de ruedas y ya estaba llorando delante de ella y de todas las enfermeras, a las que no les importaban ni mi madre ni mis lágrimas, ella me decía que no había nada que hacer, le dije señorita por favor, póngase en mi lugar, y seguía llorando, ella tratando de evadirme, me decía no puedo hacer nada, le dije: NO, SEÑORITA, NO LE PIDO QUE SE PONGA EN MI LUGAR PARA QUE ME AYUDE, QUIERO QUE ME DIGA QUE HARÍA USTED REALMENTE EN ESTE CASO, QUE ME ACONSEJA... ella me dijo: yo sacaría a mi mamá y le haría la tomografía afuera.

Y eso hicimos.

Fin de texto a modo de epílogo:
Ya no puedo recordar como sucedió todo finalmente, me parece que un doctor irresponsable le dio el alta a mi papá aprovechando que yo no estaba, en el alta no decía nada, solo mandaban antibióticos, esa era su forma de liberarse de mis quejas y de su responsabilidad sobre la vida de mi madre.
ELLA TENÍA UNA ECOGRAFÍA QUE DECÍA QUE HABÍA UN TUMOR MALIGNO EN SU HÍGADO Y LE DIERON DE ALTA RECETÁNDOLE ANTIBIÓTICOS.